Abarca todo el norte de Aragón, en la provincia de Huesca, en ella encontramos las cumbres más altas de los Pirineos: Monte Perdido, el Posets y el Aneto (todas superan los 3.300 metros). Paraíso de los amantes de la alta montaña. Es sus profundos valles, se asientan pueblos con casas de piedra y tejados de pizarra, son anchos y verdes a veces, y en otras están recortados por estrechas gargantas. Terminan en majestuosos circos calcáreos, como el de Ordesa, paraíso de los senderistas.

Más al Sur, los paisajes cambian y se convierten en erosionados, con poca vegetación, como el de la Sierra de Guara, otro paraíso del barranquismo.